TRATAMIENTO
FARMACOLOGICO.
Los medicamentos
destinados a prevenir la osteoporosis se dividen en 2 categorías:
ü Inhibidores
de la resorción ósea.
ü Estimulantes
de la formación ósea.
Siempre es necesario
estudiar a la paciente antes de comenzar cualquier tratamiento para la
osteoporosis. En la categoría de los inhibidores de la resorción ósea se
encuentran los estrógenos, la calcitonina y los bifosfonatos. Los estrógenos
estabilizan la masa ósea en los primeros años de la posmenopausia, reducen la
remodelación ósea a niveles premenopáusicos, por lo cual disminuyen el rango de
pérdida ósea y, por tanto, el riesgo de fractura. Las vías de
administración de los estrógenos para tratar y prevenir la osteoporosis no
afectan la evolución del problema. La adicción de progestágenos en las mujeres
no compromete el efecto del estrógeno y sí las protege de la incidencia de
adenocarcinoma de endometrio. La duración de la terapia estrogénica es un factor
muy importante del efecto antiosteoporótico, así como la forma continua de
usarlo. Para disminuir significativamente el riesgo, la terapia de reemplazo
hormonal probablemente requiera continuarse durante tiempo prolongado después
de la menopausia, sino indefinidamente.
· Calcitonina: Su uso se recomienda en los casos en que no es
aconsejable la terapéutica hormonal sustitutiva. Es una hormona polipéptica de
32 aminoácidos, es secretada principalmente por las células parafoliculares de
la glándula tiroide y entre sus efectos están el aumentar la masa ósea y
reducir el riesgo de fracturas. La vía de administración más aceptada es la
nasal a través de aerosol. La dosis preventiva es de 25 a 50 Ul, 3 veces por
semana y la duración del tratamiento deberá prolongarse por varios meses.
· Bifosfonatos:
Son compuestos sintéticos que se absorben de manera rápida y tienen
preferencia por la estructura ósea, también suprimen la reabsorción ósea
mediada por osteoclastos; se conocen hace 20 años aproximadamente, pero tenían
resultados desalentadores, pues los pacientes desarrollaban osteomalacia,
hiperfosfatemia y trastornos de la mineralización. Hoy se conocen nuevas formas
de bifosfonatos que, usados de forma cíclica y en dosis no elevadas, no
producen alteración de la mineralización ósea. Son el etidronato disódico y el
alendronato sódico. El más recientemente disponible es el
alendronato que es
inhibidor selectivo de la resorción ósea y 100 a 500 veces más efectivo que el
etidronato, sin causar detrimento a la mineralización ósea.7
Día tras día su
cuerpo está ocupado desechando tejido óseo y reemplazándolo con un tejido óseo
nuevo y saludable. El estrógeno le ayuda a controlar la pérdida del tejido
óseo, y la pérdida de estrógeno durante el tiempo de la menopausia causa que
las mujeres pierdan más tejido óseo que el que recuperan. Al tiempo, los huesos
se ponen débiles y se quiebran fácilmente. Esta condición se llama
osteoporosis. No obstante ya sabemos muchas formas para evitar la osteoporosis
si que no hay excusa para decir que no se pudo evitar la osteoporosis excepto
que la adquiera de forma congénita, pero aun asi hay muchas formas para tratar
y prevenir la osteoporosis durante y después de la menopausia, porque si aun en
la vejes los nietos y demás familiares necesitan a una mamita dedicada, sana y
que aun pueda cuidar de ella misma.